viernes, agosto 17, 2007

El Albigense



Papeles por la guerra social desde Chile
Publicación a-periódica de carácter informal (número 0 junio 2007)

¿Por qué Albigense?

Esta es una tentativa de rescatar una experiencia milenarista- en su diversidad y en su coherencia- Durante muchos siglos estas experiencias han sido enterradas en el olvido, revueltas milenaristas ejercen en nuestro tiempo una atracción acompañada de cierto rechazo hacia diferentes especialidades intelectuales: Historia, sociología, antropología e, incluso, la literatura y que nosotros seguimos manifestándola en estos tiempos de guerra contra la sociedad, contra lo que nos oprime y nos convierte en esclavos.
Albigenses eran ciertos herejes en Francia en el siglo XII que se oponían radicalmente a las costumbres y los sacramentos religiosos como también a la jerarquía religiosa. Mas allá de elevar posiciones de los herejes o disidentes dentro de los cristianos, lo que queremos aquí es marcar un momento de ruptura con lo existente que llevo en aquellos años al exterminio y la masacre de cientos albigenses por parte de los cruzados y dio pie a que los que quedaron vivos se agruparan clandestinamente en los montes.

Ellos tenían un sueño, el sueño más antiguo de la humanidad: la edad de oro, mil años de plena libertad. Una idea que hoy continua tan vigente como el primer día.


A propósito de nuestra existencia…

La suma incesante de pequeños y grandes momentos de ruptura con el orden existente a lo largo de la historia nos hace ver y presenciar por un instante la magia iluminada de un camino a recorrer, el mismo camino que han recorrido un sin fin de compañeros anónimos que han dado en el combate su mejor contribución para con ello buscar la transformación radical de la vida, dicho de mejor manera la destrucción sin concesiones de la sociedad de clases. ¿Pero porque hablamos y seguimos insistiendo en la lucha de clases en tiempos donde esta se ha visto desaparecida por la avaricia y el consumo desenfrenado? ¿Por qué nombrar al proletariado como un antagónico a la burguesía en donde este es casi imposible de ver?Lo diremos alto y claro, para nosotros el proletariado son todos aquellos hombres y mujeres que han sido desposeídos de sus propias vidas, sin la opción de poder controlar en su totalidad esta y se ven obligados a vender su tiempo y fuerza de trabajo a cambio de un salario u obligados a mercantilizar sus vidas a cambio de nada, sobreviviendo por la asistencia social o en los márgenes de la legalidad o ilegalidad o como es muy frecuente en todos estos casos. Porque aunque muchos hablen de la muerte del proletariado, los hechos alrededor del mundo y las explosiones sociales nos muestra como este se organiza, avanza y por cortos o largos momentos pone patas arriba a la clase dominante, agudizando conflictos e incluso llevando a situaciones de guerra social, ejemplo de ello es la guerra social que se vive en Irak y la que se vivió en tiempos recientes en Oaxaca, Atenco, Paris y Cochabamba. Que sigan todos aquellos llenándose la boca con la muerte de la lucha de clases, porque estas acciones y sus posibles reproducciones por todo el globo son como una lluvia de patadas que se dirigirán para reventarles sus podridas bocas llenas de teoría añeja y posmodernista, hablando de los precarizados, las multitudes y todo ese lenguaje amorfo que no lleva en si a nada, solo a reproducir y validar por completo las lógicas del capital, para en un buen mañana ser aceptados dentro de la repartición del gran pastel aunque solo les sea considerado un pequeño pedazo. Las llamadas a la exclusión, o al fin del sistema binominal, incluso a humanizar el capital, solo nos pueden traer consigo una engorrosa miseria prolongada por el resto de nuestra existencia.

Dejemos de lado los lamentos y los llantos petitorios para los repugnantes magnates rojos y toda su basura progresista para que sigan pactando “el mejor de los mundos posibles” con sus buenos aliados: la policía y sus defensores. Que sigan soñando con que el trabajo asalariado dignifica y nos hace libre, ya que este nunca lo ha hecho ni nunca lo hará, ni aquí ni en el mejor de los mundos, ya que validarlo así, solo nos hace extender aun más nuestras cadenas pesadas que se prolongan por siglos de explotación, algunos llegando a creer que el trabajo autogestionado nos libera, pero sin cuestionar que este solo sigue reproduciendo la lógica de hambre, muerte y aburrimiento como es el Capital.

Solo buscando dentro de esos pequeños espacios de resistencia y fortaleciéndolos aun más, podemos plantar cara a la violencia sistemática con que el Capital nos oprime y nos lleva hasta situaciones sin límites, entender que esta pequeña contribución a la prolongación y extensión de la revuelta, dada en este humilde papel, no puede ir sino acompañada de la misma practica que en estas líneas detallamos, porque entender la guerra social separada de la vida cotidiana o la teoría de la practica, no tiene ningún sentido, ya que nos haría caer en pequeñas burbujas de ideas o posiciones que jamás tendrán su momento de choque frontal con este mundo y seguiríamos las líneas trazadas en los viejos guiones de la burguesía, porque para eso ya esta los sofistas y los cristianos de base. Aquí de lo que se trata es generar análisis, propuestas y por sobre todo estar al calor de lucha de clases, no como un elemento externo, no como un medio contrainformativo, no como un periodista independiente, sino como prensa proletaria y revolucionaria, que participa activamente desde la guerra social misma, no como un invitado o acreditado amigo sino como parte del conjunto que quiere destruir este mundo y recuperar de forma inmediata sus vidas.

Es por ello que aun en estos tiempos de “derrota” como a muchos les gusta llamar,seguimos en guerra contra la sociedad de clases.



Días de furia, noches de rabia

La guerra social se expande y multiplica

Sobre los hechos acontecidos a raíz del día del joven combatiente

Nuevamente las calles del centro de santiago y de otras tantas ciudades se vieron alteradas por el combate callejero producido por cientos de jóvenes como también por la destrucción impetuosa de la propiedad privada, el saqueo y el vandalismo, mientras la periferia se mostró rebelde y furiosa, descargando su odio contra los cuerpos policiales y los repugnantes periodistas. Todos ellos proletarios asqueados de sus rutinarias vidas. Que muchos de estos rebeldes no se planteen las garantías de este mundo y su innecesaria existencia se ve como un mal presagio en el desarrollo del conflicto de clases. Pero de momento las cosas están así, aunque de todas formas hemos visto un incremento de los conflictos sociales y las acciones con una mayor radicalidad, muestra de ello son todos los combates callejeros que se han dado a raíz de una serie de expresiones de descontento y rabia a consecuencia del llamado transantiago, una muestra más del intento de la burguesía por captar la totalidad del tiempo de todos los explotados e imponer de forma violenta el uso del automóvil, invento que solo fomenta el individualismo burgués. Pero eso no fue así ni será así, ya que los proletarios salieron a las calles y defendieron con los hechos su malestar y rabia, con sus cuerpos, sus piedras, sus molos y sus balas.

¿Pero que podemos esperar de esta grandiosa revuelta? TODO. Porque si de ella no podemos esperar nada y nos conformamos con las manoseadas reivindicaciones de sueldos dignos, educación publica de calidad o transporte gratuito manejado por el Estado es mejor irnos a casa y quedarnos sentados viendo tranquilamente la televisión.

Tanto los bombazos, los saqueos, las ráfagas de fuego y los enfrentamientos con cócteles molotovs y piedras no son ajenos a este día, ni a la revuelta estos hechos vienen dados hace siglos de explotación y lucha, como muestra de rabia de todos los explotados enfurecidos. Tampoco es como divulgan los medios mal llamado de comunicación, llamando lumpen, vándalos o delincuentes a los propios protagonistas de los conflictos, excluyéndolos de esa realidad de combate, diciendo que ese escenario no les pertenece, pero no se dan cuenta que la agudización de los conflictos y la creación de estos mismos, los produce la propia clase, esos mismos que ellos llaman lumpen, infiltrados o delincuentes y que todo lo que en lenguaje comunicacional se llama destrozo, saqueo o violencia viene dado por las propias consecuencias de esta misma situación. Los medios de incomunicación idiotizadores mentales de las personas, creadores de la llamada opinión publica, generan un pensamiento único sobre los disturbios y sus consecuencias, de manera que llaman a condenar satánicamente cada acto de violencia contra la policía y sus carros policiales, esos mismos que pueden reventar y destrozar un cuerpo con solo tocarlo, pero se horrorizan con el lanzamiento de piedras. Esos mismos periodistas que no tienen asco en darle la mano a los curas pedofilos y asesinos, siendo los primeros en señalar con el dedo y su cámara todo rompimiento del orden social, hablando de la delincuencia como un fenómeno separado de los conflictos sociales, creando esa falsa dicotomía delincuencia-sociedad, pero esta es mentira ya que esta es otra falsificación más propia de la sociedad del espectáculo y los efectos de la “llamada” delincuencia son una contradicción más de esta sociedad enferma que intenta justificar cada acto a partir de los paradigmas de la sociedad de los responsables y los bomberos moralistas.

Los medios solo hacen el ridículo aparte desinformar, haciendo creer sus suspicacias al resto de la gente. Su juego mediático auspiciado por el Estado, da sus frutos y con ello lleva a la cárcel a una cantidad no menor de “posibles delincuentes” numero que será acrecentado en grandes cantidades cuando el estado en el mes de junio, apruebe la ley del menor, que “culpabiliza” a jóvenes de 16 años, enviándolos directamente a la cárcel, aunque hace años ya lo esta haciendo, este espectáculo, es la forma de validar sus actos represivos ante la llamada opinión publica. Esa gente que cree ciegamente los dichos de los canales televisivos y no tiene un dedo de frente para entender lo que pasa, llegando a la estupidez máxima con sus dichos contra los “vándalos”. Para esto, el Estado recurre a esa gente, para que valide con sus dichos y sus actos, la persecución y la represión contra todos los insubordinados, prueba de ello son los 2 compañeros aprendidos en la universidad tecnológica metropolitana (UTEM), tras una salida callejera, aquel 26 de marzo, en vísperas al día del joven combatiente, en donde estudiantes de ingeniería en computación idiotizados con su afán de cuidar su universidad del lumpen vandálico, entrega a estos dos jóvenes, encerrándolos en una sala de dicha universidad. Universidad que por lo cual solo les hace gastar sumas millonarias y despilfarrar años hermosos de sus vidas para domesticarlos y entregarlos a la esclavitud asalariada llamada trabajo. La universidades, las escuelas, los reformatorios, los psiquiátricos y todas esas instituciones que intentar ser enclaves de buena conducta, no pueden ser reformadas o retocadas sino que tienen que ser destruidas, no existe universidad alternativa ni buena, solo existe la que te educa para tu esclavitud.

Por eso nos sentimos con razón de criticar a quienes ante actos de violencia, como ellos les llaman, han elegido acusar y criminalizar. Solo les queda ahorcarse con sus propias corbatas de buenos estudiantes ante que sean vapuleados por las hordas de bárbaros insurrectos.La revuelta, las acciones insurrectas de tipo individual o de forma colectiva, no hacen más que devolver de poco en poco la vida a cientos de miles de personas, rompiendo por escasos minutos la paz social que les golpea con el cruel látigo del capital, mostrando alegría, destrozos, pasión, y una nueva forma de relacionarnos. La revuelta no es más que la recuperación de forma momentánea de nuestras vidas y la destrucción de las relaciones mediadas por el capital.Al fin de cuentas, la delincuencia pone de manifiesto la revuelta de un sector explotado contra la sociedad de clases, mientras el sistema tiene la necesidad de esconder sus contradicciones por medio del “manejo” del fenómeno delictivo. En definitiva la delincuencia solo muestra de manera explicita la propia lucha de clases.

Porque cada día es de combate contra el Estado y el Capital

Contra lo existente, sus defensores y falsos críticos

Guerra social



Como un tulipán ¿ o la estrategia de la represión?

No se si todos recordaran que tras la antesala a las “violentas” jornadas del día del joven combatiente, el martes 27 de Marzo la sucia representante de la tiranía capitalista chilena, Michelle Bachelet, tuvo una grata y larga conversación con el primer ministro de Italia, don Romano Prodi, en donde discutieron por largas horas de la seguridad, la vigilancia, las relaciones entre los dos países y un sin fin de tonterías que la prensa burguesa resalto, ¡como la venta de los tulipanes!¿Pero que se esconde tras las careta de una visita diplomática? ¿Qué podría entregar el Estado italiano a la noble democracia chilena en materia de progreso económico o estabilidad?¿Porque a nosotros nos debiera interesar lo que pudieron llegar a conversar estas dos partes? Al parecer Italia es un modelo a seguir y no solo en materia económica sino lo que respecta a la represión. Es aquí donde nosotros deberíamos ser más astutos y entender que significa esta amigable visita, el porque y para que de su visita.

El estado italiano es un pionero en materia represiva, ya que junto a sus brazos derechos e izquierdos desde hace años, mantiene una persecución y represalia contra todos lo movimientos que no son compatible con la idea de orden y progreso, manteniendo un estado policial contra los delincuentes, los anarquistas, los antifascistas, los rebeldes, los sin papeles. La historia nos demuestra como este Estado se ha visto inmiscuido en numerosos montajes policiales contra decenas de compañeros los cuales hoy día o están muertos o pudriéndose en las cárceles, algunos ejemplos de ello son:

-Plaza Fontana: 12 de diciembre de 1969, explotan bombas atribuidas a grupos anarquistas. Después de 25 años las autoridades admitieron que fueron puestas por servicios secretos del Estado, 17 muertos y 88 heridos. Guiseppe Pinelli es detenido, pero muere misteriosamente al ser arrojado desde la ventana de la comisaría. Pietro Valpreda pasó más de 8 años en la cárcel acusado de este hecho.

-El caso Marini: en 1996 comienza una vasta operación represiva en toda Italia y en las islas, en donde registran casas y detienen algunas decenas de anarquistas. 54 imputados, de los cuales 44 son absueltos. Tras 8 años de investigaciones, detenciones y represión salen las condenas para los compañeros.Orlando Campo: 10 años

Rose Ann Scrocco: 30 años + 15 años ( afortunamente clandestina)

Angela Lovecchio: 15 años

Francesco Porcu: cadena perpetua mas 18 meses de aislamiento diurno

Gregorian Garagin: 30 años + 9 años

Carlo Tesseri: 3 años y 10 meses de pena residual

Alfredo Maria Bonanno: 6 años y 2000 euros

Es que para el poder es temible que muchos anarquistas y revolucionarios estén implicados en la lucha, usando para ello todos los medios que creen adecuados: periódicos, panfletos, ocupación de edificios, apoyo a los presos, manifestaciones, sabotajes. Esto les inquieta, en un momento que tienen que aparentar la tranquilidad de los cementerios pero que en cualquier momento la sublevación se expande como un reguero de pólvora. A lo largo de las ultimas dos décadas en Italia se han multiplicado y esparcido pequeños sabotajes. Los medios utilizados son simples y fáciles de copiar. El análisis también es simple y claro: “debemos autoorganizar nuestras vidas y nuestra lucha, para ello tenemos que atacar al poder en todas sus formas antes que sea demasiado tarde, antes de que la tecnología y el control comiencen a manejar nuestras propias mentes”.

Al no poder ponerle freno a tamaña situación por medio de distintos artículos y operaciones policiales, el Estado italiano necesita que “exista” organizaciones terroristas como la organización revolucionaria anarquista insurreccionalista: O.R.A.I., por la cual muchos compañeros se encuentran procesados en el macro montaje Marinni, con ello justifica sus nuevas medidas represivas. De esta forma acudimos a la introducción de nuevas medidas legislativas que favorecen la represión, el escarmiento y la supresión de quien lucha por evidenciar las miserias de esta “humanidad”. La ampliación del uso del articulo 270 bis, el cual castiga el promover, apoyar, constituir, organizar o simplemente participar en asociaciones dirigidas a derrocar violentamente las instituciones económicas y sociales del Estado, solo ser parte de un colectivo u organización que tenga como principio básico destruir el estado, cualquier orgánica de carácter anarquista y revolucionario, este articulo nace al calor de la lucha de clases en los años 70 y como forma de eliminar sistemáticamente las organizaciones o núcleos revolucionarios que tomasen las agitación armada para enfrentar al Estado y el Capital, la entrada del articulo 270 tris y los nuevos regimenes de detención (art.41 tris y quatris, muy similares a los ficheros de especial seguimiento españoles, los cuales son aplicados como sistemas de exterminio dentro de las cárceles) suenan como respuestas a estas exigencias.Y aún así, los ataques, las luchas, las publicaciones, las manifestaciones, el apoyo a presos, los centros sociales, las bibliotecas. Todo el conjunto de cosas que potencia la lucha de clases siguen viva y con mayor fuerza. Algo de esto debiéramos de aprender de los compañeros en Italia.

Los recientes montajes policiales que se han visto en Chile como los dos jóvenes aprendidos en la universidad UTEM en vísperas al día del joven combatiente los cuales pasaron mas 50 días encarcelados por una burda farsa creada por el estado para amedrentar y coartar el enfrentamiento callejero y directo contra las fuerzas del orden. Las persecuciones y el hostigamiento policial a Jorge Lizama, quien participo en las manifestaciones del 29 de Marzo a quien lo seguían de muy cerca los policías, ya que sabían que estaría ahí dándolo todo, solo les falto un par de buenas imágenes y fotos para con eso crear un gran show mediático y poder mostrar en los canales y periódicos como de efectiva es la policía para arrestar e identificar a quienes alteren el orden, esto fue una advertencia para muchos, ¡te cuidas bien o te tenemos! Si bien jorge cometió muchos errores en la estrategia y la táctica no es menor que la solidaridad se muestre en estos casos, mas altas se sintieron las criticas y los repudios sobre el, mas que una sincera muestra de solidaridad con el y todos los represaliados. En este otro punto debiéramos sacar grandes lecciones de la solidaridad revolucionaria dada a todos los compañeros encarcelados y represaliados en Europa específicamente en España, Italia, Francia y Grecia.

No es de esperar que Chile se alimente de formas represivas traídas desde el extranjero, no es de esperar que entre gobiernos se intercambien conocimientos para la represión, lo que si es de esperar es que la solidaridad se muestre, tome forma y se multiplique de tal manera que los verdugos de siempre sientan miedo de nuestras redes.Que la solidaridad sea realmente un arma con la cual disparar.



Esta es su paz, esta es su democracia

La dictadura del Capital

El terrorismo de Estado continua y luego de ello viene la infamia

Hace pocos días presenciamos la muerte del joven Rodrigo Cisternas, quien fuera abatido por un centenar de balas de efectivos del Gope y los pacos, las mismas balas, las mismas armas, que ayer y hoy nos asesinan. No lo decimos de forma lastimera, ya que Rodrigo transformo la maquinaria que lo asesinaba cotidianamente en la esclavitud asalariada, en un arma bien dirigida contra los defensores de la dictadura del Capital, atacando con toda su furia no solo a carros policiales sino a los mismos asesinos de forma directa: a sus cuerpos. Comprendamos que el Estado no esta solo compuesto de instituciones y su relación social sino de quienes dirigen y obedecen como son los individuos con nombre y apellido y cuando atacamos no solo sus intereses sino más bien sus cuerpos, es cuando ellos comienzan a sentir miedo. La decisión y coraje de Rodrigo mostró por un instante que jamás podrán conciliar la guerra entre clases y que todos los llamados lastimeros a la calma por parte de sindicatos y partidos (mera izquierda o derecha de la dictadura capitalista), solo buscan la unidad para consolidar de esta manera el proyecto del Capital. No pedimos al gobierno nada porque del solo queremos sus ruinas. Aunque haga escuchar sus hipócritas lamentos entre esa gente a la que aborrece, esos que se hacinan en el centro y la periferia de todas las ciudades y que si fuera por el, ya nos hubiera asesinado para consolidar sus proyecciones.Basta de lamentos y procesiones miserables que solo buscan apaciguar y acallar todas las voces disonantes para así abrir de par en par las puertas a la represión contra todo rompimiento del orden social. Entendamos de una vez por todas, que los asesinatos por los pacos, las muertes en accidentes laborales y en las poblaciones, no vienen dadas por quien aprieta el gatillo o comete un error sino que el responsable y lo decimos claramente es el capitalismo en su totalidad, es la burguesía en su totalidad, independientemente de quien haya disparado los tiros.Este asesinato no debe servir para endurecer las cadenas que nos aprisionan sino convertir la guerra que hacen en guerra social contra todos los explotadores y para ello es imprescindible ante todo ir más allá de la denuncia contra los pacos y su represión sino atacar para destruir al Estado y el Capital.

Contra las balas de los pacos, quemaremos el zorrillo y el guanaco.

Contra su orden democrático, fuego, piedras y subversión.

A barrer con decisión todas las formas de capitalismo.



La burguesía y el elemento de exterminio de las luchas proletarias

“vivir así las 24 Horas del día entre un chabolo donde solo se ve un trozo de cielo y en un patio de pocos metros cuadrados, es algo que produce efectos psicológicos devastadores en la personalidad del preso. El poder tiene en sus manos una maquina de destrucción más eficaz que la silla eléctrica y eso es justamente lo que cuesta mucho entender a la mayoría de las personas libres. Hasta que no lleguemos a equiparar al aislamiento igual a la pena de muerte, cualquier lucha contra la cárcel se convertirá en algo superficial y de escasa posibilidad de progresión… porque se estaría olvidando la parte más importante, más aniquiladora, y la más efectiva de todo el conjunto del sistema represivo social puesto en acto últimamente.”

“Toda muerte en prisión es un crimen de Estado.”

Comunicado de Claudio Lavazza desde la cárcel de Huelva, España.Julio, 2003



En la tenebrosa oscuridad hay algo que se esconde, son las cárceles, las cuales están diseminadas por la faz de la tierra, lugar donde se materializa la represión, las cuales mantienen encerrados a hombres, mujeres, niños y ancianos, proletarios en su inmensa mayoría. Las cárceles se muestran como una realidad a cada instante en constante crecimiento. Por el simple hecho de que un joven asalte una panadería puede ir a parar 10 años a la cárcel, inducido por las mismas contradicciones que el capital genera (consumo, codicia, acumulación), única y exclusivamente por el bombardeo mediático impulsado por los medios serviles al capital llamados de “comunicación”, ahogado por el hecho de satisfacer necesidades absurdas que les son impuestas desde el momento en que nace. Por otro lado si un grupo de personas aburrida de su condición de explotados, decide romper drásticamente con las formas de protesta y ataca violentamente a la simbología de su opresión, destruyendo los cristales de esos centros de mercancía, incendiando coches como critica directa a la arquitectura del capital, símbolo de ello son los coches o enfrentándose a los cuerpos represivos en largas jornadas de combate como en Atenco o Oaxaca donde muchos proletarios se encuentran encarcelados desde mayo o noviembre respectivamente, únicamente por imponer sus necesidades vitales contra el mundo de la mercancía. De esta manera las cárceles se llenan y crecen, los Estados necesitan destruir todo vestigio de conciencia de clase o posiciones revolucionarias, para ello crea las cárceles y con ello una jurisdicción propia para castigar y encerrar todo atisbo de rebeldía. La burguesía con el uso de las cárceles intenta controlar y castigar, sometiendo a los presos a condiciones paupérrimas donde despoja de todo vestigio de humanidad a quienes asumen un compromiso de lucha intransigente contra la opresión y la explotación, es como para estos que crea las “cárceles de alta seguridad,” “ficheros internos de especial seguimiento,” “cárceles de tipo F” o las “QHS”, sin nombrar esos grandes campos de concentración que se encuentran actualmente en Irak o Afganistán o la mismísima cárcel de Guantánamo, las cuales son usadas como el arma de la burguesía para acabar con cualquier impulso de dignidad y humanidad. Es por ello que la cárcel es una realidad de clase.

Los Estados mantienen la represión contra los prisioneros instaurando un terrorismo de estado dentro de las prisiones, ensañándose al interior de los pasillos y celdas con la mas atroz y sangrienta brutalidad, sin mencionar los micrófonos, cámaras y todo tipo de control para coartar y castigar al prisionero, sumiéndolo en la mas asquerosa vida, llevándolo a condiciones de esquizofrenia o enfermedades terminales. Un claro ejemplo de ello son los prisioneros de action directe, los cuales llevan mas de 20 años encarcelados en durísimas condiciones de aniquilamiento físico y psicológico a consecuencia de ello a llevado a la muerte a Joëlle Aubron la cual tenia un tumor cerebral y tras 17 años de encierro logro su libertad pero en marzo del 2006 falleció, mientras Natalie Ménigon se encuentra prisionera con su cuerpo semiparalítico a causa de varios ataques cardiovasculares, con un estado de profunda depresión. Es así como en los últimos años, los estados han acentuado la represión contra los proletarios que luchan, con la excusa lógica del terrorismo internacional a llevado a miles a la cárcel. De esta forma son arrestados compañeros en distintos lados del mundo, por su condición de rebeldes sociales. A los compañeros Gabriel Pombo Da Silva y José Fernández se les arresta en Aachen (Alemania), tras un intercambio de tiros con la policía y una toma de rehenes, mientras intentaban escapar de un control policial, lo cual termino con la libertad de los compañeros más una condena de 13 y 14 años de prisión, tanto Gabriel como José son 2 rebeldes sociales que han luchado desde hace años contra el aislamiento, la tortura y el maltrato dentro de las cárceles españolas, así mismo se da orden de captura al compañero francesco Goia el cual es detenido en Barcelona, por agentes de la policía nacional y efectivos del cuerpo de los carabineri en una acción conjunta, acusado de ser miembro de las C.O.R. (células de ofensiva revolucionaria) la cual a llevado una serie de sabotajes incendiarios contra instituciones y propiedades privadas de políticos ligados a “Forza Italia”, lo que a llevado en poco tiempo a la detención de 9 compañeros en Italia. Francesco tras la posibilidad de ser encarcelado evade el arresto domiciliario por más de 9 meses, momento en el cual es apresado y luego trasladado a Madrid donde estará encarcelado hasta su extradición a Italia. Un caso similar aconteció este pasado 21 de diciembre con Juan un italiano arrestado en Girona quien evadió el arresto domiciliario en Italia, al estar acusado por el articulo 270 bis (asociación subversiva con finalidad terrorista) quien fue encarcelado en Madrid hasta su extradición a Italia en febrero del 2007. Pese a todos estos castigos, torturas y humillaciones los presos no agachan la cabeza sino que por el contrario se rebelan, producto de ello son las mas de 19 huelgas de hambre que se vivieron en las cárceles de Chile específicamente en colina y la cárcel de alta seguridad entre los años 90 y 2003, huelgas motivadas principalmente por una serie de prisioneros políticos de distintos partidos político-militares como el M.I.R., Lautaro y el F.P.M.R. donde exigían distintas reivindicaciones como: “ganar espacios vitales dentro de la cárcel,” “reagrupación con el colectivo de presos,” “negación al sistema de locutorios”. Mostrando a cada instante su oposición a las condiciones de exterminio, es así como dentro de estos años se realizan una serie de fugas como la del año 92 donde 3 presos evaden los controles y escapan, siendo asesinados sistemáticamente los capturados o bien “El vuelo de justicia”, donde son rescatados 4 frentistas desde un helicóptero en el año 96 de la cárcel de alta seguridad. Tras estas formas de rebelión, el Estado no duda en recurrir a la masacre, producto de ello son asesinados Mauricio Gómez Lira y José Miguel Martínez, quienes mueren en las inmediaciones de la cárcel por la acción de la policía de investigaciones y gendarmería quienes dispararon a quemarropa sobre sus cuerpos tras intentar fugarse en el año 92 desde la prisión de colina en santiago de chile, asimismo Pedro Ortiz cae asesinado de 13 disparos en la puerta de la prisión en esa misma fuga. Por ello vemos con urgencia aprender del pasado y sacar lecciones que puedan ayudarnos a golpear a la burguesía cada vez que atente contra uno de nuestros compañeros de clase.

Durante todo el siglo XX se puede mostrar una lucha del proletariado contra el entramado carcelario, a pesar de toda la represión y la incomunicación que puede haber entre esos grandes muros, se dan muestras de solidaridad tanto en la calle como en la mismas prisiones. Un ejemplo de ello son las revueltas en las cárceles francesas en los años 85 y 86 donde los presos incendiaron las cárceles (Fleury 85), se negaron a entrar a sus celdas con grandes huelgas de patio a nivel nacional, se tomaron los techos al vivo grito de ¡AIRE!, mostraron su solidaridad en otros penales con huelgas de hambres como en Bastia. Mientras en la calle grupos de incontrolados apiedraban policías, incendiaban neumáticos, saboteaban las instalaciones del tren de alta velocidad en distintas ciudades o bien destruian todos los diarios parisinos del 1 de Julio como en Nantes, todo ello como muestra de solidaridad con la revuelta dentro de las prisiones.

Las cárceles durante muchos momentos revolucionarios se han visto como un bastión a destruir, es así como durante la insurrección albanesa en el año 97, el proletariado abrió las cárceles y les prendió fuego, destruyendo consigo todos los archivos de la infinidad de presos. Es por ello que debemos de solidarizar con la lucha de los presos, no sin antes cuestionar teniendo claro que nuestro objetivo va mas allá de la simple reivindicación de patio o como quiera que se le llame sino que apunta a la destrucción de la sociedad de clases en el marco de la revolución social es por ello que nuestra lucha es por el comunismo, por la anarquía única lucha imposible de ser recuperada por los causes de la socialdemocracia, apoyando desde el exterior con propaganda, sabotajes, dándole énfasis a la agitación del momento, teniendo siempre en la mira la liquidación de este mundo como muchos compañeros de antaño, donde nunca olvidaron a sus compañeros presos teniéndolos siempre en la mente y en el corazón como los di Giovanni, los Roscigna, los Lavazza y tantos otros revolucionarios que atacaron las prisiones para liberar a sus compañeros viéndolo como un momento parcial dentro del combate contra la sociedad de clases, jamás como su finalidad, por que cuando hablamos de destrucción de las cárceles hablamos de destrucción del estado y con ello todo aquellos que lo sostienen. Esta forma de confundir medios y fines es lo que ha llevado a un entramado misterioso, en donde la burguesía bienpensante mete sus manos e introduce un calmante dentro de las prisiones, llamando a gritos a la sociedad para que esta reconozca a los presos el derecho. Pero ¿derecho a que? ¿A reinsertarse en la sociedad? El Estado comprende que no hay que aislar completamente a los presos sino mostrarle toda clase de ofertas en donde tenga la posibilidad de ganarse el derecho de entrar nuevamente en la sociedad (beneficios carcelarios ganados a cuesta del soplonaje, la disciplina, y por supuesto la obediencia). Los derechos no son más que las prerrogativas y garantías reconocidas al individuo atomizado de la sociedad burguesa. Es por ello que la burguesía clama por las vejaciones, las humillaciones y las torturas buscando terminar con los malos tratos, las condiciones degradantes de los reclusos, pidiendo a gritos ¡reformar las cárceles¡ ¡modernizar el sistema penitenciario¡ ¡humanizar las prisiones¡. Todos aquellos que se unen a la esquizofrenia colectiva desatada por los buenos ciudadanos en sus reivindicaciones no se dan cuenta que las cárceles no pueden humanizarse sino que deben destruirse, ya que estos esfuerzos solo llevan a fortalecer al Estado y sus cuerpos represivos, repartiendo dardos tranquilizantes a una tensión de guerra que esta y continuara pese a los esfuerzos de la burguesía por acallarla, pero que en cualquier momento estallara debido a las mismas contradicciones que esta sociedad enfermiza genera.

Por eso solidarizamos y a apoyamos a nuestros compañeros encarcelados, porque entendemos que la solidaridad no es solo palabra escrita como bien decía Roscigna, sino mas bien la continuación del conflicto, tanto la culpabilidad y la inocencia son etiquetas que la sociedad del espectáculo les cuelga a cada uno, ya que validarlas seria aceptar el juego burgués rindiendo certificado de buena conducta a la clase dominante.

Las razias represivas se siguen una tras otra como la continuidad del capital también, es por ello que las ciudades se vuelves verdaderas cárceles con su entramado urbanístico, sus cámaras de vídeo-vigilancia, sus incontables guardias de seguridad y esa esclavitud asalariada llamada trabajo. Hoy en este panóptico global llamado ciudad no queda más que anteponer a la violencia del estado la violencia proletaria que se muestra a cada instante en cada conflicto y que jamás podrán llegar a conciliar, es tarea nuestra reventar las celdas, destruir las prisiones, extender la revuelta y mostrar que mientras quede un atisbo burgués se respirara explotación.

¡POR LA ABOLICIÓN DEL SALARIO Y DE LA MERCANCIA!

¡POR LA DESTRUCCIÓN DE LAS CÁRCELES!

¡CONTRA EL CAPITAL Y EL ESTADO! ¡PRESOS A LA CALLE!

edicionespiratas@riseup.net